Saludos, querido lector:
En este post deseo comentarte algunas reflexiones sobre la crisis y un nuevo modelo de lucha contra el Gobierno y sus medidas, que someto a la luz pública para que cada quien haga lo que considere.
Las monedas tienen cara, cruz... y canto, del que todos nos olvidamos y la realidad, siendo más amplia, pues tiene más caras, más cruces... y más cantos.
Podemos aceptar estar mal por una situación sobrevenida como una enfermedad. Podemos aceptar una crisis, porque las crisis no se eligen. Podemos aceptar recortes porque sean necesarios para salir de una crisis.
Pero no podemos aceptar la injusticia.
Hay una cuestión clave en todo lo que sucede en estos días y es que resultan obvios (¿acaso no lo eran antes incluso de que dictaran la primera ley?) los puntos donde recae el peso de las medidas tomadas por el actual Gobierno para salir de la crisis. No digo nada nuevo: sanidad, educación, modificación de la ley de la dependencia, condiciones laborales de funcionarios y no funcionarios, recortes a la minería, recortes, recortes, recortes que no recaen en nadie que tenga que ver con la casta política, ni con los afortunados que posean una fortuna, o un puesto en una caja.
Recortes que caen en la gran masa, en ti y en mi, que quizás en un año nos demos cuenta del páramo en el que se ha convertido nuestro país en lo que se refiere a servicios a los que antes estábamos acostumbrados a tener, y que no, no son prescindibles ni negociables.
No hay equidad. No existe medida.
Y para más inri, sale el ministro Montoro diciendo que como no se paga el I.V.A., hay que subirlo. Nuevamente, nuestro votado gobierno premia a quien estafa. Ya se aprobó una amnistía fiscal para los defraudadores a gran escala. Ahora, como sabemos que no todo el mundo paga, en vez de perseguirlos, lo que hacemos es que paguen más los que ya lo hacen. Obviamente, es una excusa absurda, simplemente dicen algo por decir, dias posteriores a la emisión de un documental en Antena 3 sobre la estafa del I.V.A., para que estemos bien concienciados de lo malos que somos.
Hay una carencia total de lógica en estas actuaciones.
Pero bueno, como no todo lo que deseo escribir son críticas, aquí va una propuesta para la lucha. Y va en relación precisamente al I.V.A. y lo que está al final del la cuerda: el dinero.
Obviamente, lo que podemos hacer con nuestro poco dinero es no gastarlo.
Sube el I.V.A., no gasto.
O mejor dicho, sólo lo hago en aquellos sitios de mi zona, en los comercios que me rodean. Gasto la gasolina mínima, no voy a dar un paseo al otro lado de la ciudad, no gasto en grandes superficies...no gasto. Redirijo mi dinero a mi ahorro y a subvencionar el comercio que me rodea. Reduciré mis gastos en alimentación, en ropa, en libros (eso ya lo hago, compro en los mercadillos libros usados a un euro), en electrónica, en todo. Y obviamente lo mantengo fuera de los bancos. Se acabaron los caprichos porque no es época.
Si todos lo hiciéramos es posible que se produjera un aumento del paro, una reducción de los ingresos del estado, etc, pero por otro lado podemos forzar a que se cambien de rumbo las medidas. Dejemos de soportar este gobierno financieramente. El gobierno no es España. Ni el PSOE, ni el PP ni ningún otro partido es España porque ya estaba antes que ellos llegaran. Si ellos caen, otros llegarán.
No somos un país de segunda, simplemente tenemos políticos de segunda.
Hagámosles caer de una vez por todas, siguiendo la línea judicial, ya puesta en marcha, y por la guerra económica. Si nos atacan, defendámonos. No gastemos. Y cuando el gobierno salga, porque el país está en una situación insostenible, el que venga hará otra cosa, porque este ya sabemos lo que seguirá haciendo, tras escasos 7 meses de legislatura, restando 3 años y 5 meses para el próximo. (Se me antoja demasiado).
Cortémosles a ellos lo que toca. Les informaré de mis progresos en esta línea.
Gracias, recibe un cordial saludo.